
Crítica publicada en Esencia Cine
“Quién cada 9 de noviembre, como siempre sin tarjeta, la mandaba un ramito de violetas”. De la misma forma que en la canción que escribió Cecilia en 1975 Ane comienza a recibir un ramo de flores cada jueves. Y de golpe le cambia la vida. Sin remite, ni tarjeta, ni siquiera unas palabras que la indiquen quién es la persona que las envía. Sólo flores. Ese elemento que siempre suele significar ausencia. Regalamos...