
Nunca, hasta ahora, había sentido miedo, del de
verdad, al leer las páginas de un escritor. Ese curioso honor lo ostenta, desde
ayer, el norteamericano Cormac McCarthy. Su libro La carretera es el primero
que, por momentos, ha conseguido desasosegarme y atenazarme por encima de todas
las cosas.
La
obra se desarrolla en un mundo post-apocalíptico, tras un cataclismo (¿guerra?)
nuclear del que casi nada se conoce. Ni siquiera...